martes, 4 de octubre de 2011

Agresión electrónica: nueva amenaza de salud para los adolescentes

Foto: padres e hijos hablan sobre reglas de conducta sanas y aceptables en las conexiones por Internet.
Los jóvenes que son víctimas de agresión electrónica, como la colocación en línea de fotos embarazosas y el acoso en los salones de chat, pueden correr un mayor riesgo de incurrir en problemas de comportamiento como el consumo de alcohol, la suspensión del colegio o el trato discriminatorio en persona.
Foto: una joven lee un mensaje de texto.



Las agresiones ya no se limitan al patio de la escuela. Los jóvenes utilizan ahora nuevas tecnologías de comunicación, como teléfonos celulares, asistentes personales digitales e Internet para comunicarse con otras personas en Estados Unidos y en el exterior. Los nuevos métodos de comunicación, como los mensajes de texto, los salones de chat y los sitios de Internet para socializar (p. ej., MySpace y Facebook) permiten que los jóvenes se relacionen con más facilidad, a veces con individuos que no conocen en persona.
Las nuevas tecnologías aportan muchos beneficios potenciales a los jóvenes. Permiten que se comuniquen con su familia y amigos en forma frecuente. Las nuevas tecnologías también ofrecen la oportunidad de hacer conexiones sociales gratificantes a aquellos adolescentes y preadolescentes para quienes es difícil establecer amistades en las situaciones sociales tradicionales. Además, el acceso frecuente a Internet permite que los jóvenes amplíen sus conocimientos sobre una amplia variedad de temas.

Medidas

Sin embargo, el auge reciente de la tecnología no está exento de posibles riesgos. Los jóvenes pueden utilizar los medios de comunicación electrónicos para avergonzar, hostigar o amenazar a sus compañeros. A este tipo de violencia se le ha llamado de distintas maneras, como acoso en Internet y cyberbullying o Internet bullying (en inglés); sin embargo, agresión electrónica es el término que de forma más precisa abarca todos los tipos de violencia que ocurren a través de los medios electrónicos. Esta nueva forma de violencia cobra cada vez más víctimas entre los adolescentes y preadolescentes. Al igual que con otras formas tradicionales de violencia juvenil, la agresión electrónica está asociada a la tensión emocional y a los problemas de comportamiento en la escuela.
El personal directivo de las escuelas puede crear una ambiente positivo al hablar con los estudiantes y los maestros, brindar capacitación si es necesaria y establecer políticas, programas y un plan para abordar en forma eficaz la cuestión de la agresión electrónica.
Los padres y las personas encargadas del cuidado de los menores pueden hablar con los jóvenes sobre tecnología y, juntos, establecer reglas de conducta sanas y aceptables para evitar que se conviertan en víctimas de la agresión electrónica. Durante años, los padres y las personas encargadas de los menores les han preguntado a los niños a dónde van y con quién lo hacen cada que salen de la casa. Deberían hacer las mismas preguntas cuando los jóvenes se conectan a Internet. Navegar juntos por Internet permite descubrir actividades beneficiosas en línea, ayuda a los padres y a quienes cuidan de los menores a estar al día en las actividades a las que se dedican los niños y puede servir para reducir los riesgos de sufrir una agresión. La comunicación con otros padres y las autoridades escolares crea un frente más unificado y sólido para enfrentar la agresión electrónica

No hay comentarios:

Publicar un comentario